Nicaragua: Alertamos nuevamente sobre la grave situación de violencia en la Costa Caribe Norte y demandamos justicia para los pueblos Miskitu y Mayangna
- Condenamos profundamente los asesinatos de dos comunitarios Mayangna perpetrados el mes de julio por terceros colonos y demandamos al Estado investigar de manera diligente los hechos.
- Exhortamos a la comunidad internacional a denunciar las prácticas extractivas y violadoras de derechos humanos perpetradas por empresas transnacionales de minería, explotación forestal y ganadería.
San José, Costa Rica, 18 de julio de 2023.- Durante los primeros días del mes de julio, dos miembros de la comunidad Mayangna, en la Costa Caribe Norte de Nicaragua, fueron asesinados. Sergio Julián Juan, de cuarenta y dos años, y Serato Juwith Charly, de veintitrés años, fueron atacados y asesinados, sin provocación alguna, por colonos y bandas armadas que han violentado sistemáticamente a la población Miskitu y Mayangna por casi una década.
El 2 de julio de 2023, Sergio Julián Juan, originario de la comunidad de Wingpulo del territorio Mayangna Sauni As, fue emboscado y asesinado por personas armadas. Se dirigía hacia su comunidad luego de denunciar a la asamblea comunal la situación de la invasión de tierras de la comunidad de Bethlehem. Hasta la fecha, el Estado no ha avanzado con la investigación de los hechos.
Serato Juwith Charly, originario de la comunidad de Kauhmakwas del territorio Mayangna Sauni As, fue atacado por colonos armados el día 5 de julio, capturado y asesinado con arma de fuego. Estos hechos fueron denunciados por la familia de Serato ante la Policía Nacional de Bonanza.
Desde el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) condenamos estos terribles asesinatos, que exponen, una vez más, la profunda situación de violencia que enfrentan las comunidades Miskitu y Mayangna en la Costa Caribe de Nicaragua, y que las amenaza incluso con el etnocidio. Denunciamos también la impunidad en que permanecen estos crímenes, perpetrados por colonos y empresas con la connivencia del Estado nicaragüense.
La falta de respuesta de las autoridades nicaragüenses ante estos crímenes, a pesar de que múltiples comunidades cuentan con medidas de protección otorgadas desde el 2015 por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y desde 2016 por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), perpetúa la violación sistemática de derechos que viven las comunidades y les continúa exponiendo a amenazas, secuestros, despojo, violencia sexual, desplazamiento, crisis alimentarias, asesinatos y otros graves riesgos para su integridad y su vida.
Ante estos hechos, exhortamos a la comunidad internacional a poner su mirada en la Costa Caribe nicaragüense; a pronunciarse por los derechos humanos de las población Miskitu y Mayangna; y a denunciar las prácticas extractivas y violadoras de derechos humanos perpetradas por empresas transnacionales con capitales canadienses, australianos, británicos y colombianos de industrias de minería, explotación forestal y ganadería.
Asimismo, llamamos a las autoridades nicaragüenses a avanzar en la investigación de los asesinatos de Sergio Julián Juan y Serato Juwith Charly, así como de todos los hechos de violencia perpetrados desde, al menos 2015, y a dar cumplimiento pleno a las medidas de protección. A la CIDH y la Corte IDH, las instamos a dar seguimiento cercano de la situación y velar por el cumplimiento de las medidas.
Actualmente cuentan con medidas cautelares de protección otorgadas por la Comisión las comunidades Miskitu: Naranjal, Cocal, Polo Paiwas, y las comunidades Mayangna: Musawas, Suniwas y Wilú. Adicionalmente, las comunidades de la Costa Caribe Norte que cuentan con medidas provisionales de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) son: Klisnak, Wiwinak, Esperanza Río Coco, Santa Fe, San Jerónimo, Wisconsin, Francia Sirpi, Esperanza Río Wawa y Santa Clara. Estas medidas también cubren a personas defensoras de derechos humanos del Centro por la Justicia y Derechos Humanos de la Costa Atlántica de Nicaragua (CEJUDHCAN).