10 de enero de 2025 Comunicado de Prensa

La CIDH otorga medidas cautelares para Carlos Correa, defensor de derechos humanos desaparecido en Venezuela

Washington, DC. 10 de enero de 2025. – El Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) celebra la decisión unánime de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de otorgar medidas cautelares a favor del defensor de derechos humanos Carlos José Correa Barros, desaparecido desde su detención por agentes estatales el pasado 7 de enero de 2025 en Venezuela. Carlos Correa es reconocido por su incansable trabajo como director de la organización venezolana Espacio Público, dedicada a promover y defender los derechos humanos, particularmente la libertad de expresión, el acceso a la información y la protección de periodistas. Con varios años de experiencia, Correa ha sido una figura clave en denunciar las restricciones al espacio cívico en Venezuela.

En una intervención ante el Consejo de Derechos Humanos en julio de 2024, Correa expresó: “Las detenciones arbitrarias de personas defensoras de derechos humanos […] reiteran un patrón de persecución para silenciar las voces críticas y evitar la movilización”

Un contexto alarmante. La CIDH, que monitorea la situación en Venezuela desde 2005, destaca en su Resolución 3/25 las graves violaciones a los derechos humanos en el país, caracterizadas por la represión sistemática, detenciones arbitrarias, torturas, desapariciones forzadas y hostigamiento contra quienes defienden derechos fundamentales.

En informes recientes, como su Informe Anual 2023 y el Informe de diciembre de 2024 titulado «Venezuela: Graves Violaciones de Derechos Humanos en el Contexto Electoral», la CIDH ha documentado cómo el Estado utiliza el terror como herramienta de control social, dirigido especialmente contra periodistas, defensores de derechos humanos y líderes opositores.

En el caso de Carlos Correa, la CIDH expresa especial preocupación por las declaraciones estigmatizantes del Ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, quien acusó públicamente a Correa de estar involucrado en “planes de conspiración” y calificó a las organizaciones defensoras de derechos humanos como “lavadoras de dinero”. Estas declaraciones no solo deslegitiman la labor de defensa de derechos humanos, sino que agravan el clima de hostigamiento y violencia.

Requisitos acreditados por la CIDH. En su análisis, la CIDH concluyó que el caso de Carlos Correa cumple con los requisitos de gravedad, urgencia e irreparabilidad:

Gravedad:

• La detención de Carlos Correa por agentes estatales el 7 de enero y la falta de información oficial sobre su paradero constituyen un riesgo extremo para su vida e integridad personal.
• Las declaraciones estigmatizantes de altos funcionarios, como las realizadas por el Ministro de Relaciones Interiores, agravan su situación y reflejan una estrategia de criminalización contra defensores de derechos humanos.
• Se señala la negativa del Estado a proporcionar información mínima sobre su situación jurídica, incluyendo el lugar de detención, las condiciones de su salud y las razones de su detención, dejándolo en total desprotección.

Urgencia:

• La falta de conocimiento sobre el paradero y condiciones de detención de Correa incrementa con el tiempo el riesgo de daños irreparables.
• Obstáculos reportados, como la demora de cinco horas para aceptar un recurso de habeas corpus presentado por su equipo legal, reflejan la falta de voluntad estatal para garantizar justicia o protección.

Irreparabilidad:

• La posible afectación a los derechos a la vida e integridad personal constituye la máxima situación de irreparabilidad en términos de derechos humanos.

Medidas ordenadas al Estado venezolano. En la Resolución 3/25, la CIDH exige al Estado venezolano:

• Proteger la vida e integridad personal de Carlos Correa.
• Garantizar que pueda desarrollar su labor de defensa de derechos humanos en un entorno libre de amenazas y hostigamientos.
• Informar de manera inmediata y detallada sobre su situación y paradero, así como sobre las acciones implementadas para cumplir con estas medidas.

Desde CEJIL reconocemos el importante rol de la CIDH y de su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) en la protección de las personas defensoras de derechos humanos en contextos de crisis como el de Venezuela. Instamos al Estado venezolano a cumplir de inmediato con estas medidas cautelares, cesar las prácticas de hostigamiento y garantizar la libertad y seguridad de Carlos Correa. La desaparición de Carlos Correa refleja el entorno hostil que enfrentan los defensores de derechos humanos en Venezuela y la urgencia de la acción internacional para frenar estas graves violaciones.

Junto con Espacio Público y la Comisión Internacional de Juristas (ICJ), CEJIL acompaña estas medidas cautelares. Nos encontramos extremadamente preocupadas por el paradero y la seguridad de Carlos Correa y extendemos nuestra solidaridad a su familia, a Espacio Público y a todas las personas defensoras de derechos humanos en Venezuela, quienes enfrentan una situación insostenible de persecución y violencia.