Honduras incumple con su obligación de proteger a las personas transexuales
Tegucigalpa, 02 de septiembre de 2010
El pasado 26 de agosto Nohelia Flores Álvarez, persona transexual y víctima de violaciones de derechos humanos, sufrió un atentado contra su vida mientras caminaba por la Ciudad de Comayaguela, Honduras. Producto de este hecho falleció un joven que la acompañaba.
Este atentado se relaciona con un juicio que inició el pasado 24 de agosto y mediante el cual se juzga a un miembro de la policía preventiva por su presunta participación en el intento de asesinato de “Nohelia”. Los hechos que se juzgan se remontan al 18 de diciembre de 2009 cuando Nohelia se negó a ofrecerle servicios sexuales al policía y por ello fue secuestrada y apuñalada 17 veces en la garganta, la espalda, el estómago y los brazos. Posteriormente denunció los hechos e identificó al policía como responsable del crimen. Desde dicha fecha la Red Lésbica Cattrachas acompañó a “Nohelia” en su proceso de búsqueda de verdad lo que provocó un aumento en el riesgo para las miembras de la organización.
En el transcurso del proceso, tanto “Nohelia” como los testigos, investigadores y fiscales involucrados han sufrido reiteradas amenazas, algunas de ellas ocurrieron minutos después del atentado descrito.
El pasado 18 de agosto de 2010, el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) y Amnistía Internacional enviaron una carta formal a la Dirección de Fiscales y a la Fiscal Especial de Derechos Humanos solicitando la implementación inmediata de medidas de protección para proteger a Nohelia, los testigos y las personas que han sufrido amenazas durante la investigación. El atentado perpetrado contra “Nohelia” y la muerte del joven demuestran que el Ministerio Público no tomó ninguna medida para garantizar su vida e integridad personal.
La Red Lésbica Cattrachas, la Asociación LGTB Arcoiris de Honduras, el Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH), el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), el Centro para la Educación y Prevención del SIDA (CEPRESI), el Centro de Investigación y Promoción para América Central en Derechos Humanos (CIPAC), HIVOS, y CEJIL condenan los hechos antes descritos y el contexto de violencia que afecta a la comunidad lésbica, gay, bisexual y transexual (LGBT) en Honduras. En este país son frecuentes los casos de personas que han quedado desfiguradas, con lesiones graves o incluso han sido asesinadas por su orientación sexual. La situación se agrava porque existe participación de agentes estatales en algunos de los casos y porque la impunidad es casi absoluta.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha establecido que los Estados tienen la obligación de combatir la “impunidad por todos los medios disponibles, ya que ésta propicia la repetición crónica de las violaciones de derechos humanos y la total indefensión de las víctimas y sus familiares”. Asimismo los Estados deben proteger a los operadores de justicia, investigadores, testigos y familiares de las víctimas de hostigamientos y amenazas que tengan como finalidad entorpecer un proceso, evitar el esclarecimiento de los hechos y encubrir a los responsables de los mismos.
Las organizaciones de derechos humanos mencionadas hacemos un llamado al Estado de Honduras para que investigue de manera seria y efectiva los hechos ocurridos el día 26 de agosto. Asimismo se exhorta a las autoridades competentes para que adopten de manera urgente medidas efectivas para proteger a los testigos y a las autoridades involucradas en la investigación y juzgamiento del caso.