Delegación del Europarlamento llama a redoblar la presión sobre Nicaragua
La Delegación para las relaciones con los países de América Central (DCAM) del Parlamento Europeo realizó un intercambio de opiniones con activistas y personas defensoras de derechos humanos sobre la crisis en Nicaragua, de cara a las próximas elecciones.
Bruselas, 17 de marzo de 2020- “Ortega ha emprendido un camino del que no quiere dar marcha atrás, no nos quedará otra opción que redoblar nuestra presión” dijo la europarlamentaria española Alicia Homs, quien hizo sus comentarios como parte del intercambio de opiniones con activistas y defensores de derechos humanos del país centroamericano, en el marco de una sesión de la Delegación para las relaciones con los países de América Central (DCAM) del Parlamento Europeo que tuvo lugar el pasado 15 de marzo.
Homs, representante del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), recalcó su preocupación por los mecanismos utilizados para institucionalizar la represión, como las leyes aprobadas recientemente como la Ley de Agentes Extranjeros, Ciberdelitos y la denominada Ley de defensa de los derechos del pueblo a la independencia, la soberanía y autodeterminación para la paz. “El gobierno de Ortega parece más preocupado por callar a todo aquel que piense diferente a él”, agregó.
Su inquietud fue compartida por su compatriota el eurodiputado Leopoldo López Gil, quien destacó como lamentable el que la represión, la violencia y las privaciones de libertad sean algo común en Nicaragua. “Pareciera que la voluntad del régimen de los Ortega, lejos de reformar para cobrar mayor transparencia o mayor participación democrática, lo que ha hecho es ratificar o avalar las persecuciones, el acoso político, la censura”. López Gil, que representa al Partido Popular español, señaló que en su opinión “El objetivo está claro: la permanencia en el poder por parte de los Ortega”
La eurodiputada Soraya Rodríguez Ramos, del partido Ciudadanos de España, puntualizó que Europa no legitimará los resultados de unas elecciones realizadas sin condiciones. “No vamos a contribuir de ninguna manera a blanquear ningunas elecciones que no sean democráticas, no vamos a blanquear un fraude electoral si no se dan elecciones democráticas libres y que todos tengan la misma oportunidad”, sentenció.
Tanto López Gil como Homs y Rodríguez externaron sus opiniones luego de escuchar a activistas y personas defensoras de derechos humanos, entre ellos, la abogada nicaragüense Wendy Flores, coordinadora del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más.
Para Flores el diálogo con la DCAM fue un espacio valioso “Además de exponer directamente la realidad que vivimos en Nicaragua, se trató de una oportunidad para pedirle al Parlamento Europeo que use todos los instrumentos a su alcance para seguir acompañando al pueblo nicaragüense”.
Además de activistas y parlamentarios, el espacio también incluyó el más reciente informe sobre Nicaragua de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, quien señaló que la crisis política y derechos humanos en el país se ha exacerbado por los daños ocasionados por la pandemia y el impacto de los huracanes Eta y Iota.
“Mientras Nicaragua se acerca a las elecciones generales el 7 de noviembre de 2021, el Estado de Derecho sigue debilitándose, la adopción reciente de varias leyes contrarias, a los derechos, a la libertad de asociación, expresión, la participación política y las garantías al debido proceso, constituyen un claro ejemplo de la continua restricción del espacio cívico y democrático”, destacó la abogada Flores.
La DCAM es una instancia del Parlamento Europeo que sigue asuntos económicos, políticos, sociales y legales de 9 países, entre los que se encuentra Nicaragua. El pasado 07 de octubre impulsó la aprobación de la resolución del Parlamento Europeo que condenó la situación de derechos humanos en Nicaragua e instó a las instancias de la Unión Europea a incrementar la presión para evitar la aprobación de leyes contrarias a estándares internacionales de derechos humanos.
Además, la Delegación ha enfocado en el seguimiento del Acuerdo de Asociación EU-Centroamérica y ante la preocupación por la crisis democrática en Nicaragua, ha recomendado excluir al país de dicho Acuerdo; y solicitado el incremento de sanciones individuales contra funcionarios vinculados a graves violaciones de derechos humanos.