CIDH preocupada por la situación de las trabajadoras de la maquila en Honduras
En una audiencia celebrada ayer, en la sede de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en Washington, los comisionados de este organismo manifestaron su preocupación por la situación de los derechos de las trabajadoras de las maquilas en Honduras, e instaron al Estado a hacer esfuerzos para brindar una respuesta para terminar con la explotación a la que se encuentran sometidas.
La audiencia fue solicitada por la Colectiva de Mujeres Hondureñas (CODEMUH), el Comité de Familiares Detenidos Desaparecidos de Honduras (COFADEH), y el Centro por la justicia y el Derecho Internacional (CEJIL). Estas organizaciones manifestaron que actualmente existen en Honduras 229 empresas maquiladoras, y de acuerdo con la Asociación Hondureña de Maquiladoras, cuentan con 130 mil plazas de empleo, de estas el 69% son ocupadas por mujeres jóvenes.
Las trabajadoras se encuentran sometidas a violaciones de derechos humanos específicas debido a su condición de mujeres. Por ejemplo, como parte del proceso de reclutamiento se les obliga a quitarse la ropa para observar si poseen cicatrices de cesárea y se les somete a pruebas sanguíneas para determinar si se encuentran embarazadas. Si alguna de estas pruebas resulta positiva, se les impide el acceso al empleo, aunque no se les informa de las verdaderas razones.
Además, las trabajadoras llevan a cabo sus labores en condiciones de trabajo extenuantes, pues se les fija una meta de producción y en caso de no cumplirla, reciben un salario menor al de otras trabajadoras que si logran la meta. En consecuencia, se ven obligadas a realizar sus labores sin interrupción, sin tomar descansos e incluso, sin consumir alimentos para poder cumplir con la meta fijada. A ello se suma que el salario mínimo establecido para la industria de la maquila es menor que el establecido para el resto de la población.
Las condiciones en las que deben trabajar también les causan graves problemas de salud, por ejemplo, la constante realización de movimientos repetitivos o posturas forzadas. No obstante, no reciben atención médica adecuada y sus enfermedades no son calificadas como profesionales, debido a la falta de profesionales especialistas en medicina del trabajo.
A pesar de las graves violaciones denunciadas, el Estado no provee mecanismos efectivos para la reparación de los derechos de las trabajadoras. Por ejemplo, las inspecciones para verificar las condiciones de trabajo no son realizadas por la falta de personal especializado en medicina del trabajo o porque los empresarios no les permiten a los inspectores ingresar a las empresas. Por su parte, los mecanismos judiciales también resultan inefectivos ante la ausencia de instrumentos para garantizar el cobro de las obligaciones laborales a las empresas.
El Estado señaló que ha adoptado medidas para mejorar la situación de los derechos de las trabajadoras. Sin embargo, reconoció que algunas de estas violaciones continúan ocurriendo y que no cuentan con suficiente personal para la realización de inspecciones, ni con personal especializado en la inspección de maquilas. Igualmente manifestó estar abierto al diálogo para la búsqueda de soluciones, en conjunto con las organizaciones peticionarias y las trabajadoras.
Las organizaciones peticionarias solicitaron al Estado de Honduras que contrate personal especializado en medicina del trabajo para la realización de inspecciones en los centros de trabajo y la atención de las enfermedades de las trabajadoras de las maquilas. Asimismo pidieron que a la brevedad posible se apruebe la propuesta de reforma al Código de Trabajo en relación al tema de salud ocupacional.
Finalmente, instaron a la Comisión a que realice una visita al Estado de Honduras, para que verifique la situación de los derechos de las trabajadoras de las maquilas. La Comisión señaló que existe una invitación abierta para realizar una vista, por lo que tomarán en cuenta la solicitud de las organizaciones peticionarias, en virtud de las graves violaciones denunciadas.
CODEMUH, COFADEH y CEJIL, esperan que el Estado de Honduras cumpla con sus obligaciones internacionales y adopte medidas efectivas para evitar que las graves violaciones a los derechos humanos de las trabajadoras de las maquilas continúen ocurriendo.