19 años de Guantánamo: la administración entrante tiene la oportunidad de hacer historia y cerrar el centro de detención
En el 2021, el Presidente electo Joe Biden debe cumplir con las obligaciones internacionales de Estados Unidos y clausurar el centro de detención.
Washington, D.C. Enero 11, 2021.- En el aniversario número 19 de la apertura del centro de detención de Guantánamo, el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) insta a la administración entrante de Biden a cerrar esa cárcel de acuerdo a las obligaciones internacionales de Estados Unidos en materia de Derechos Humanos.
Hasta ahora cuarenta hombres se encuentran detenidos en Guantánamo. Veinticinco de ellos nunca han sido formalmente acusados y permanecen detenidos como “detenidos indefinidos”, y seis de ellos han sido declarados unánimemente para su liberación por todas las agencias relevantes. Ninguno de ellos ha tenido acceso a un juicio justo que se acople a los estándares internacionales de derechos humanos.
En mayo del 2020, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió su informe final sobre las violaciones a los derechos humanos cometidas contra el ex detenido y ciudadano de Argelia, Djamel Ameziane. Esta fue la primera decisión hecha por un organismo internacional de Derechos Humanos sobre las violaciones cometidas en cárcel de alta seguridad en Bahía Guantánamo.
Más allá de las conclusiones y recomendaciones, las cuales indican que Estados Unidos debería proveer “reparaciones materiales y morales adecuadas” por la detención, tortura y maltrato sufridos por el señor Ameziane durante sus 12 años en confinamiento, el reporte establece que los Estados Unidos debería crear una comisión de la verdad para investigar el campo de prisioneros y enjuiciar a las personas implicadas en los actos de tortura cometidos entre 2002 y 2008, entre otras medidas aplicables al centro.
Adicionalmente, en el 2006 así como en el 2011, la CIDH publicó dos resoluciones las cuales determinan que los Estados Unidos causó un daño irreparable a los detenidos y que Guantánamo debe cerrarse inmediatamente. Además, en una declaración conjunta publicada en el 2014 por la Relatoría Especial sobre la Tortura, varias agencias de las Naciones Unidas y la Comisión, los Estados Unidos fue instado a “adoptar todas las medidas legislativas, administrativas, judiciales y de cualquier otro tipo que sean necesarias para procesar, con total respeto al debido proceso, a las personas detenidas en la Base Naval en Guantánamo o, donde corresponda, para la inmediata liberación o traslado a un tercer país”. Asimismo, en agosto del 2015, la CIDH publicó un reporte temático titulado “Hacia el cierre de Guantánamo” que discute el caso de Ameziane detenidamente y detalla las violaciones a los derechos humanos en Guantánamo.
Estas decisiones y reportes proveen una hoja de ruta con miras al cierre de Guantánamo que la administración entrante necesitará seguir. En el 2021, el Presidente electo Joe Biden debe cumplir con las obligaciones internacionales de Estados Unidos y clausurar el centro de detención. Adicionalmente, Estados Unidos deberá garantizar el debido proceso para las personas quienes permanecen detenidas; al igual que a su derecho a no ser retornadas a sus países donde temen persecución, tortura o malos tratos. Finalmente, Estados Unidos debe investigar, procesar y castigar a los responsables por la tortura y maltrato de los detenidos en Guantánamo, proveyendo de reparaciones adecuadas a todos aquellos quienes han sufrido esta expresión emblemática de la Guerra contra el Terror.